- La recuperación de la gestión del agua de manos privadas a públicas conllevará una inversión en mejorar las instalaciones, lo cual supondrá menos problemas en forma de reventones
«Que lo que paguemos los ciudadanos en forma de tasa vaya directamente a mejorar la red del agua». Sin duda, una de las primeras y más visibles ventajas del cambio de gestión de privada a pública que tendrá lugar en julio del presente año. Bien claro lo explica nuestra concejala, María Sánchez.
A fin de cuentas, es lo justo. Que todo el dinero que se obtenga de un servicio público y que paguen los ciudadanos vaya directo para mejorar las instalaciones, bien necesitadas tal y como se puede ver estos días con constantes reventones en las tuberías.
Y es que después de veinte años de gestión privada, un informe elaborado por el propio Ayuntamiento de Valladolid ha hecho ver que hacen falta, ni más ni menos, 178 millones de euros para acondicionar las instalaciones de agua de la ciudad. Han sido muchos años de nueva obra pero no de cuidado de lo hecho hasta ahora.
Una vez recuperada esta gestión para lo público, este déficit se irá extinguiendo poco a poco en los próximos quince años, con lo que los primeros beneficiados serán los vecinos de Valladolid. Como debe ser teniendo en cuenta el servicio mínimo básico y de todo que es la gestión del ciclo del agua.
