El objetivo de una Zona de Bajas Emisiones NO debe ser la renovación de los vehículos, sino la reducción drástica de los viajes en vehículo a motor y por lo tanto una circulación de vehículos muy inferior a la actual, es decir, las Zonas de bajas Emisiones deben de ser parte del cambio hacia un modelo de ciudad totalmente distinto, libre de contaminación para garantizar la salud de las personas, la salud de la ciudad y la salud de nuestro medio ambiente.
En este sentido, nuestro Grupo Municipal desarrolla las siguientes propuestas, con la intención de que el diseño e implantación de la ZBE sea mucho más ambiciosa, acorde a la preservación de la salud pública, a la emergencia climática y a una distribución más equitativa del espacio público.
RESUMEN DE LAS ALEGACIONES
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Aumento de la delimitación de la ZBE hasta los 3,2 km2, objetivo del anterior proyecto de Ordenanza.
En la anterior Ordenanza se planificó una zona más extensa en base a los estudios técnicos consensuadas entre las diferentes áreas y teniendo en cuenta las propias alegaciones que redactaron algunos colectivos que solicitaban una zona de bajas emisiones más extensa. El fin no era otro que el de mejorar la calidad de aire de la ciudad y por lo tanto, influir positivamente en la salud de las personas de Valladolid.
En el proyecto presentado por el actual equipo de gobierno sobre la ZBS, tomando como referencias los datos del proyecto anterior de 3,2 km2 y el actual de 1,1 km2, puede comprobarse que los resultados obtenidos en la reducción de CO2 son, en principio, incoherentes. La ZBE planteada actualmente en 1,1 km2, que recordemos no es similar a la primera planteada por el anterior equipo de gobierno, sino que es aún más pequeña, obtiene mejores resultados que la anterior planteada sobre 3,2 km2, y las diferencias son muy llamativas.
Nadie puede creerse que en una zona 3 veces más pequeña en la que existirá más densidad y tránsito de vehículos, se pueden ver reducidas en mayor medida las emisiones de CO2 y otros agentes contaminantes en el aire.
Por todo lo anterior, creemos que es necesario rescatar y mantener la propuesta de Zona de Bajas Emisiones ya planteada por el anterior equipo de gobierno y aprobada inicialmente. Además no hay ninguna estación medidora de contaminación en la zona delimitada en la propuesta de ordenanza ZBE. Este hecho va a dificultar el seguimiento de los indicadores. Un motivo más por el que la ZBE debería ampliarse para, al menos, incluir en su ámbito las estaciones existentes en Poniente y Arco de Ladrillo.
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Valores reconocidos por la OMS como objetivos para su cumplimiento.
Aprobado por el Pleno del Ayuntamiento de Valladolid en junio de 2022, el Plan de Mejora de la Calidad del Aire pretende impulsar medidas que mejoren los problemas puntuales de calidad del aire en nuestra ciudad, con objeto de llegar a cumplir con los valores recomendados por la OMS.
Los registros indican que estamos lejos de conseguir los valores objetivo de la OMS a 2030, sobre todo en lo relativo a NO2, Partículas 2,5 pm y Ozono. que se superan en todas las estaciones.
En el actual proyecto de Ordenanza de Zona de Bajas Emisiones, se ha quitado de todo el texto toda alusión a los índices recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS),
El Art. 7 del RD 1052/2022 Regulación de las ZBE, dice que en el punto 1 que “los objetivos permitirán cumplir con los valores límite de calidad del aire previstos en el Real Decreto 102/2011, de 28 de enero, relativo a la mejora de la calidad del aire”. Pero el mismo punto, en el segundo párrafo añade: “el proyecto de ZBE contribuirá adicionalmente a alcanzar, en un plazo razonable, los valores guía de las directrices sobre calidad del aire de la Organización Mundial de la Salud”.
Entendemos que cumplir con estos valores establecidos por la OMS debería de ser el objetivo de cualquier ayuntamiento de cara a mejorar la salud de su ciudadanía. El 80% de las muertes prematuras por contaminantes se podrían evitar reduciendo las emisiones de gases contaminantes, especialmente las partículas de 2,5 pm.
Por ello proponemos que, de cara al año 2030, se reduzcan de forma progresiva las concentraciones anuales de NO2, partículas 10 pm y partículas 2,5 pm.
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Otras alegaciones que complementan el documento:
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Reequilibrio en el espacio de la ciudad: zonas peatonales, carriles exclusivos y carriles bicicleta. Proponemos se estudie la viabilidad de continuar con la peatonalización de los espacios, ampliando las zonas peatonales en Veinte de Febrero, Pedro Niño y San Lorenzo. Así como el fomentar calles residenciales en los barrios y regular las aceras para asegurar el ancho mínimo. Además, que los proyectos que se quieran realizar para la ejecución de nuevos carriles bici no se hagan a partir de la construcción de vías ciclistas segregadas del tráfico, que se realicen devolviendo espacio a las personas, utilizando para los mismos, carriles ya existentes para el tráfico motorizado.
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Aumento de la masa arbórea. Proponemos implementar un estudio para poder incrementar las zonas verdes arboladas en la ZBE, en los barrios y también en el resto de la ciudad, aumentando en lo posible este valor.
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Inclusión y participación en la coordinación y la gestión de la ZBE de las concejalías de Medio Ambiente, Salud Pública y Seguridad Ciudadana y Personas Mayores, Familia y Servicios Sociales.
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Informe exhaustivo de la implementación de la ZBE para personas con discapacidad y movilidad reducida. Realizar este estudio para poder conocer como las ZBE afectan a la movilidad de las personas con algún tipo de discapacidad y/o movilidad reducida, a las que afecta de forma directa.
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Delimitar las Zonas de Especial Sensibilidad. Se propone delimitar zonas de especial sensibilidad en torno a los equipamientos escolares, sanitarios, hospitalarios y de residencias de ancianos. Deberán incluir requisitos y medidas de reducción de emisiones más exigentes que los que se establezcan en la zona principal.
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Implementación de medidas a la ZBE (transporte público, transporte urbano). Proponemos la supresión en el Art. 6 Objetivos de la ZBE, de la nueva ordenanza: “Acelerar el proceso de renovación y actualización del parque de vehículos que circulan por la ciudad de Valladolid, con objeto de disminuir la contaminación, no sólo en la zona sino en el resto de la cuidad, aparte de las mejoras en emisión sonora y aumento de la seguridad activa y pasiva de los mismos”. No se trata de un objetivo de las zonas de bajas emisiones, según el Art. 14 de la Ley 7/2021, de 20 de mayo, de Cambio Climático y Transición Energética.
Recuperar el texto íntegro de la ordenanza municipal para establecer determinados carriles Bici y carriles bus-taxi en la ciudad de Valladolid, publicada en el Boletín Oficial De La Provincia De Valladolid el 13 de julio de 2022:
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Incluir un plan para la reducción de la accidentalidad. Estudiar cómo poder reducir este tipo de accidentes, en ocasiones mortales e implementar medidas eficaces que reduzcan claramente este tipo de siniestros.
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Implementación y aumento en las ayudas al transporte público (Taxis). Aumentar la partida presupuestaria a partir del año 2025 del área de Tráfico y Movilidad para las ayudas a las adaptaciones necesarias para el transporte público del taxi hacia vehículos eléctricos o 0 emisiones.
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Incluir estudio de los beneficios obtenidos en el escenario tres relativos a la salud. Proponemos que se desarrolle un estudio económico de los beneficios que resultarían en el escenario 3 y que todos ellos, se hagan públicos en el proyecto, con el fin de que se vean reflejados en el mismo.
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Los cálculos que ofrece este estudio están calculados para una ZBE de 1,1 km2 y para el escenario número 1, 98 millones de euros de ahorro.
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Escenario 2, en el que el ahorro sería de más de 120 millones de euros.
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