Ser concejal no se estudia, ni hay academias para aprender las funciones y papeles de un responsable municipal. Pero desde el mismo día que lo eres, tienes delante de ti un montón de papeles que firmar y varias decenas de decisiones urgentes que tomar. Hay que saber atender a las exigencias que quienes elaboraron tu programa electoral, a los representantes de organizaciones sociales, empresas, sindicatos y, cómo no, a los medios de comunicación.
Y resolver las urgencias del día a día y visitar a la gente que necesita apoyo; y a las que te lo reclaman, aunque no te parezca que lo necesitan. Y a la vez, intentar llevar a la práctica lo que, un día, un montón de gente voluntariosa se empeñó en escribir para dibujar su ciudad deseada, aunque hubiera cosas casi imposibles. Y bregar con una maquinaria administrativa impermeable al cambio y que es lenta hasta la exasperación. Con un presupuesto que no llega. Y en un equipo de gobierno en minoría.
El jueves 1, a las 18:30h en el Salón de Actos de La Casa Revilla, los concejales y concejalas de Valladolid Toma La Palabra nos presentarán sus reflexiones y experiencias de estos primeros dieciocho meses en el Ayuntamiento. No va a ser un balance del año y medio en el gobierno, ni quiere simular una rendición de cuentas, porque están previstos otros momentos para ello en Valladolid Toma La Palabra.
Se trata de un espacio para compartir sus vivencias, desde una mirada más personal, para reconocer las limitaciones para la acción política desde las instituciones, pero también para disfrutar de cómo, pese a todo, pese a tanto, algunas cosas sí que cambian en esta ciudad.
Te esperan. Te esperamos.