El creciente desarrollo socioeconómico contemporáneo y su enorme impacto en la sociedad y en el medioambiente, han generado una importante conciencia social de respeto y protección hacia el medio natural y a todos los seres vivos, particularmente hacia aquellos grupos que por su condición económica, social, geográfica o de especie, son más vulnerables.
El ordenamiento jurídico no puede ser ajeno a la realidad y a la ética social de cada momento histórico. Es la hora de que nuestro tiempo se rija por presupuestos éticos en los que no cabe el maltrato hacia los animales, en los que no cabe ni maltrato ni violencia en cualquiera de sus manifestaciones.
A los Municipios les corresponde ser garantes de intereses generales de salud pública (física y psíquica), seguridad de las personas y bienes, y sobre todo ser garantes de la protección a la Infancia como responsabilidad de toda la sociedad y de todas sus instituciones.
El pasado 10 de noviembre de 2015, el pleno de ésta Corporación Municipal, acordó, por unanimidad de los 28 miembros presentes, solicitar a UNICEF Comité Español, iniciar los trámites para la obtención de la renovación del Sello de Reconocimiento Ciudad Amiga de la Infancia y seguir contando con su apoyo y colaboración para el desarrollo, la mejora continua y la innovación de las políticas de infancia y adolescencia en nuestra localidad. (sic). En el cuerpo de aquella moción, Esta Corporación Municipal, acordó apostar de forma decidida, por el cumplimiento de la Convención sobre los Derechos del Niño (sic).
La Organización para las Naciones Unidas (ONU) a través del Comité de los Derechos del Niño, integrado por 18 expertos en el campo de los derechos de la infancia procedentes de distintos países del mundo, se ha pronunciado de forma expresa en contra de que los niños, niñas y adolescentes menores de 18 años participen y asistan a eventos taurinos para excluirlos de la Violencia de la Tauromaquia, instancia que ha sido emitida en base a un informe de la Fundación Franz Weber, como parte de su campaña Infancia sin Violencia.
La Convención reconoce al niño (menor de 18 años) el derecho a un estándar de vida apropiado para su desarrollo mental, físico y moral, así como la obligación de los Estados de adoptar medidas que garanticen esta protección al menor. Así lo ha expresado el Comité en las observaciones finales dirigidas a varios países firmantes de la Convención.
Para dictar dicho pronunciamiento, el Comité ha tenido en cuenta el interés superior del niño, un principio universal también incorporado en todos los ordenamientos internos de protección de la infancia y la adolescencia, en virtud del cual, el interés superior del niño, a no ser víctima de violencia, y a no ser expuesto a la misma, prima sobre cualquier otro interés legítimo que pudiera concurrir o entrar en conflicto, como el derecho a participar libremente en la vida cultural. El mismo principio se aplica a todos los demás países firmantes de la Convención, incluido España.
Esta postura del Comité tiene una repercusión de magnitud mundial, especialmente en los países que como España, todavía no ha tomado medidas para evitar que los niños acudan a espectáculos y eventos taurinos, reciban clases de tauromaquia o participen como toreros. Los Estados Partes se comprometen en virtud de la Convención a asegurar al niño la protección y el cuidado que sean necesarios para su bienestar y garantizar su desarrollo físico, mental, moral y social, y para ello se deben adoptar todas las medidas administrativas, legislativas, sociales y educativas que sean necesarias, reconociendo expresamente el derecho del niño a la protección contra toda forma de perjuicio o abuso mental, el derecho a la educación compatible con la dignidad humana, la protección contra el desempeño de cualquier trabajo que pueda resultar peligroso para su desarrollo físico, mental, moral o social y el derecho al esparcimiento, al juego y a las actividades recreativas propias de su edad -que no cumplen los eventos taurinos.
La aceptación de la Convención por parte de un número tan elevado de países, refuerza la necesidad de garantizar de forma universal la Protección de la Infancia. Teniendo en cuenta que las valoraciones del Comité de los Derechos del Niño, consideran la tauromaquia una actividad violenta a la que se expone al niño desde pequeño vulnerando sus derechos a la integridad física, mental y emocional, ya no existen argumentos que justifiquen el hecho de amparar legal y administrativamente la participación y asistencia de niños en espectáculos y eventos taurinos.
ACUERDOS
- Eliminar la etiqueta “Ciudad Taurina” al municipio de Valladolid, que ni adjetiva de ningún modo al conjunto de la ciudadanía, ni contribuye a la incorporación de la misma en la exclusión de la Violencia, ni aporta nada en la aplicación del acuerdo adoptado unánimemente por ésta Corporación el día 10 de Noviembre de 2015.
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Instar al Gobierno de España a asegurar al niño la protección y el cuidado que sean necesarios para su bienestar y garantizar su desarrollo físico, mental, moral y social, y adoptando todas las medidas administrativas, legislativas, sociales y educativas que sean necesarias, con el objetivo de cumplir con el pronunciamiento internacional para proteger y reforzar en los niños de Valladolid, la gama de valores éticos concretos consagrados en la Convención sobre los Derechos del Niño, entre ellos la educación para la paz y la no violencia.
Valladolid, 8 de junio de 2016
Charo Chávez Muñoz
Portavoz Grupo Municipal Sí Se Puede Valladolid
María Sánchez Esteban
Portavoz Grupo Municipal VTLP
