- Los cuatro ediles en el Ayuntamiento de Valladolid se reunieron en la Casa Revilla con decenas de personas que quisieron escuchar y preguntar por la experiencia tras año y medio de Gobierno
Un año y medio después, era momento de explicar. De explicar, de exponer y de escuchar, más concretamente. Este jueves los cuatro ediles de Valladolid Toma la Palabra en el Ayuntamiento se dieron cita con todo aquel que quiso acercarse a la Casa Revilla para escuchar cómo ha sido este año y medio dentro del equipo de Gobierno, un acto al que se acercaron decenas de personas a título individual o de colectivos y asociaciones de Valladolid.
Así, en un ambiente cordial y distendido pero con la seriedad de tener que explicar algunas decisiones trascendentales que se han tomado en el seno del Consistorio, fueron los propios concejales y concejalas quienes tomaron primero la palabra para hacer ver sus sensaciones después de más de dieciocho meses de gestión para el cambio en la ciudad.
Las conclusiones fueron claras. No está siendo fácil, los trámites burocráticos a veces aprietan, hay problemas inesperados que se cruzan por el camino y dificultan todo lo que nos gustaría hacer, pero poco a poco Valladolid empieza a ser otra con nuestra ayuda desde dentro del Ayuntamiento. Ya se han dado grandes avances como la remunicipalización del agua, la promoción de la igualdad tanto en la propia sociedad como en el deporte y un cambio de rumbo impresionante en políticas sociales y de urbanismo, aquellas en las que más se ha podido influir debido a las concejalías que gestionamos de manera directa.
No ha dejado de haber impedimentos o detalles que han dificultado todo lo que hemos querido hacer, pero el optimismo y las ganas de transformar la ciudad han prevalecido sobre todo. Sí, nadie dijo que gobernar fuera a ser fácil, pero cuatro concejales llenos de ilusión son unas armas muy poderosas dentro de una institución mastodóntica como es el Ayuntamiento de Valladolid.
Más allá de las explicaciones de María Sánchez en Medio Ambiente y Sostenibilidad, de la inestimable colaboración de Rosalba Fonteriz en plenos, comisiones o consejos, de la labor de Manuel Saravia en Urbanismo, Infraestructura y Vivienda o de la brega de Alberto Bustos en favor del Deporte, la Juventud y la Participación Ciudadana, también hubo ese necesario turno de preguntas para aclarar dudas sobre lo que ya ha sido y lo que está por venir.
“¿Qué va a pasar con el Campus de la Justicia?”. “¿Y el soterramiento?”. “¿Se van a hacer más inversiones en políticas sociales?”. “¿Estamos consiguiendo que la cultura repunte?”. “¿Cómo es el trabajo día a día con otro partido en el Gobierno?”. Fueron decenas de cuestiones a las que los ediles fueron dando respuesta de manera pausada y sin tapujos, haciendo ver que el ritmo no para y que queda cuerda para rato.
Poco a poco las cosas van cambiando en Valladolid. Es evidente que la participación vecinal, la tolerancia, la igualdad, la transparencia y las políticas sociales se han disparado desde el cambio de Gobierno, pero hay objetivos por cumplir, que no queremos dejarnos en el tintero. Aún queda mucha legislatura y estamos tan ilusionados como el primer día, eso sí, dando explicaciones a todo aquel que las pida. Seguimos.
*Echa un vistazo a la galería de fotos del encuentro en la Casa Revilla.