- Entrevista a nuestro concejal de Deportes, Participación Ciudadana y Juventud en El Norte de Castilla el 15 de julio de 2018
Desde el punto de vista deportivo, la temporada echó el cierre el 30 de junio, con alguna que otra excepción de deportes que siguen o ámbitos como el escolar en el que la actividad acabó antes. Así, es la hora de hacer balance, uno que, en el Ayuntamiento de Valladolid, corresponde hacer a Alberto Bustos como concejal de Deportes. Para él, existe un «avance progresivo» de las políticas pautadas cuando llegó a la Concejalía, que ha permitido, entre otras cosas, que el último ejercicio se hayan superado los 13.500 niños que practican deporte escolar. Aunque aún quedan retos que cumplir.
-¿Cuál es el balance que hace de la temporada concluida?
-Se percibe un avance progresivo de las políticas que queríamos llevar a cabo. A nivel de deporte escolar, ha sido la temporada de mayor participación de la historia, con más de 13.500 inscritos, y por primera vez ha habido más niñas que niños.
-¿Cuál cree que ha sido la clave?
-La clave ha estado en acercarnos a todos los centros educativos. Había que recuperar la confianza y tratar que aquellos en los que ningún niño participaba tuviera acceso a este tipo de actividades. Hemos atacado ese problema por tierra, mar y aire, con el programa ‘El deporte VA al colé’, simplificando cuando fuera posible las gestiones y tratando de ajustar a cada centro a las necesidades y a la normativa que exigían los juegos.
-Además, la disposición y mejora de determinados espacios también habrá influido, ¿no?
-En tres años se han acometido 146 inversiones en instalaciones de base todo tipo. Han sido alrededor de seis millones de euros que puede que no se vean, dado que no se inauguran, aunque aun así son determinantes. Valladolid tiene unas instalaciones buenas desde hace ya tiempo, pero había déficit en el mantenimiento. La idea es priorizar la rentabilidad social y no a la mediática, y que las inversiones estén bien distribuidas por todos los barrios. A donde no han llegado, llegarán, y, por ejemplo, en Villa del Prado, se construirá una pista polideportiva, mientras que en Las Delicias se hará el pabellón del Allue Morer. Dado que la ciudad se mueve al ritmo del deporte, este no puede estar limitado a una zona.
-¿Qué le dice que haya más niñas que niños en el deporte escolar?
-Es un paso importante, pero si uno cree que la igualdad total es real, no hará más que dar pasos hacia atrás. El reto es que cuando lleguen a los 14 o 15 años no abandonen, porque todavía existe un parón llegada esa edad. Tenemos que concienciarnos de que tienen que tener un espejo en el que mirarse; muchas veces las mujeres deportistas no cuentan con la relevancia social que merecen.
-Ese trato al menos igualitario es el que se ha ofrecido a través de los convenios de élite.
-Algunos clubes con ese respaldo municipal son femeninos, como el Aula Cultural, el Parquesol, el San Pío o el Ponce en su día… Se trata de poner a esas y otras entidades en un nivel mayor en apoyo económico y también de visibilidad.
-Al fin y al cabo, por su condición de amateur, siguen siendo de base…
-Las circunstancias económicas del país hacen medir las inversiones no solo por parte de las instituciones, también de las empresas. Es bueno recordarles que no hay nada mejor para vender su marca que invertir en los valores del deporte, se gane luego o se pierda. El Ayuntamiento llega hasta donde puede; aunque el global en nuestro caso es menor para los deportes de élite, el dinero para la base y el deporte escolar es más y está llegando a más clubes y a más modalidades deportivas. Los clubes de élite, en todo caso, están yendo a mejor, gracias a la responsabilidad de sus directivos.
-¿Cuál es el resultado de apostar por el turismo deportivo?
-En tres años ha habido más de 900 eventos deportivos, muy variados en cuanto a disciplinas y categorías y con muchos participantes que han provocado un retorno económico que ha aumentado en casi un 3 3 Sí, de tal forma que hoy el deporte es lo que más turismo está generando en Valladolid. Aunque no fuera así habría que potenciarlo. Debemos potenciar una ciudad en la que el deporte sea un actor protagonista por todo eso que es capaz de aglutinar.
La práctica deportiva «natural, diaria y en familia», el gran reto y «aspiración»
VALLADOLID. Además de tratar de promocionar la «incorporación de modo decidido, determinante y estable de la mujer en el deporte de Valladolid», varios son los retos de la Concejalía de Deportes en el tiempo que le queda de mandato a Alberto Bustos. El primero claro es «intentar consolidar todo aquello que se está consiguiendo», porque «todo es muy frágil» y no es amigo del conformismo el concejal. Si una de sus intenciones es que el tejido empresarial, hostelero y hotelero se sume a generar sinergias con el deporte, a la familia, en abstracto, le reclama también que participe de este ámbito social.
«Hace tiempo en un encuentro con Juan Carlos Pastor me contaba cómo en los países nórdicos forma parte de la rutina diaria la práctica deportiva. Lo hacen de la misma manera que van a clase o a trabajar o que se alimentan, todos los días, de forma natural y en familia», dice el concejal, convencido de que es parte importante de su cometido el que existan tanto instalaciones como espacio abiertos para poder desarrollar esta práctica no solo de una manera prevista y organizada, sino también gratuitamente y sin la necesidad de estar federado o de haberlo planificado previamente. «Cada vez hay más gente que hace deporte. Debemos disponer de los medios para que los ciudadanos puedan acceder a un bien social de primera magnitud. Ese es el gran reto y la aspiración», concluye.