Moción contra la discriminación en el trabajo por VIH

• Pleno del 4 de diciembre de 2017, moción de Valladolid Toma la Palabra

María era una trabajadora importante en su empresa. Tenía 35 años y desde hacía dos era la directora comercial. Es decir, dirigía una agencia que por entonces era la primera de España en el sector y la tercera de Europa. Además, desde hacía 10 años vivía con el VIH.

Como cada vez es más frecuente, el VIH nunca tuvo un gran impacto en el estado de salud de María, lo que favoreció que no tuviera que revelar en ningún momento esta situación en su entorno laboral. No obstante, motivada por la muerte de una amiga muy cercana por VIH, decidió entrar en un estudio de tratamiento antirretroviral experimental y, por ello, puso en conocimiento a su empresa de su situación, acordando una rebaja temporal de puesto y salario, para poder dedicarle tiempo a la participación en el estudio.

Sin embargo, una vez concluido el estudio, la empresa no la reincorporó a su puesto de trabajo previo, sino que le dio a elegir entre el  traslado a una sucursal que la empresa había cerrado un mes antes o marcharse. María se negó, denunció hasta en dos ocasiones a la empresa y ganó ambos casos, por lo que la empresa se vio obligada a readmitirla en su puesto y con sus funciones. Comenzó entonces una fase de acoso laboral, vacío por parte de los compañeros, incomprensión y un ambiente de trabajo insoportable que acabó con el abandono de su puesto de trabajo.

Historias como la de María son por desgracia aún habituales hoy en nuestra sociedad, puesto que la falta de una información adecuada en torno al VIH en el ámbito laboral contribuye a perpetuar un miedo a la propagación fácil de la infección y a la vigencia de prejuicios y estereotipos asociados a ella que acaban generando situaciones de discriminación y de vulneración de derechos hacia las personas con VIH en el ámbito laboral. Estas situaciones provocan que muchas personas con VIH no puedan tener un trabajo estable, vivan con miedo de que se conozca su seroestatus, no sean contratadas o puedan perder su trabajo.

De esta forma, la discriminación en el puesto de trabajo es una de las principales barreras para las personas con VIH. Por ello, es necesario que toda la sociedad actúe y es una responsabilidad de los y las políticas encabezar la respuesta, puesto que de nosotras depende dar los pasos decididos y firmes necesarios para eliminar este tipo de situaciones.

Para ello contamos con un marco internacional de referencia: en el año 2014, la ciudad de París, la Asociación Internacional de Profesionales de Atención del SIDA (IAPAC), el Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH / SIDA (ONUSIDA) y el Programa de Asentamientos Humanos de las Naciones Unidas (ONU-Hábitat), en colaboración con socios locales, nacionales, regionales e internacionales y las partes interesadas, impulsaron la Declaración de París (conocida como de Ciudades Fast-Track), en virtud de la cual las diferentes ciudades se comprometían a acelerar sus respuestas locales a la problemática del VIH.

Esta iniciativa se centra en conseguir las alianzas necesarias entre ciudades para compartir recursos, programas y medidas que permitan alcanzar los siguientes objetivos:

1. Alcanzar los objetivos 90-90-90 en 2020 que permitirían acabar con el VIH en 2030:

   1. Garantizar que al menos el 90% de las personas con VIH conocen su estado serológico.

   2. Garantizar que el 90% de las personas diagnosticadas con el VIH reciban terapia retroviral continuada.

   3. Aumentar al 90% la proporción de las personas con VIH en terapia antirretroviral con carga viral indetectable.

2. Aumentar la utilización de los servicios de prevención del VIH.

3. Reducir a cero el impacto negativo del estigma y la discriminación.

4. Establecer una plataforma común, basado en la web para permitir la monitorización en tiempo real de progresos
   https://www.fast-trackcities.org/implementation-strategy

Además, nuestro ayuntamiento debe actuar claramente contra la discriminación por VIH en los centros de trabajo. Para ello se propone también la adhesión como institución colaboradora a la iniciativa “Empresas Responsables con el VIH y el sida en España” impulsada por la organización española “Trabajando en Positivo”, con la que el ayuntamiento se comprometería a tener un papel fundamental a la hora de favorecer la sensibilización en torno al VIH de la ciudadanía.

Por todo ello, la concejala que suscribe, en nombre del grupo municipal de Valladolid Toma la Palabra, presenta esta moción, para que sea debatida en el pleno del Ayuntamiento y se sometan a consideración los siguientes

 

ACUERDOS

1. El Ayuntamiento de Valladolid se adherirá a la Declaración de París (Ciudades Fast-Track).

2. El Ayuntamiento de Valladolid colaborará en la iniciativa “Empresas Responsables con el VIH y el sida en España” de la organización Trabajo en Positivo.

3. El Ayuntamiento de Valladolid insta al Gobierno de España a revisar toda la normativa sanitaria y de función pública existente para que la infección por VIH sea catalogada como enfermedad o infección infecto-transmisible en lugar del término usado en la actualidad de infecto-contagiosa.

En Valladolid, a 29 de noviembre de 2017

Rosalba Fonteriz García
Concejala de Valladolid Toma la Palabra