- La Junta de Gobierno del Ayuntamiento ha dado luz verde al Plan ideado desde la Concejalía de Medio Ambiente y Sostenibilidad, gestionada por nuestra edil María Sánchez
Porque debemos respetar el medio ambiente, cuidarlo, mimarlo. A fin de cuentas, de él depende nuestra propia salud. Por ello desde que nuestra concejala María Sánchez comenzó a gestionar el Área de Medio Ambiente y Sostenibilidad, nos hemos empeñado en dar una vuelta de tuerca a al aire de Valladolid, a través de un nuevo Plan de Acción que actuaría en situaciones de contaminación del aire urbano en la ciudad. ¿La buena noticia? Que este vio la luz este miércoles a través de la Junta de Gobierno del Ayuntamiento.
Llegados a este punto la pregunta parece clara. ¿Qué puntos contiene este nuevo documento para mejorar la salud medioambiental de Valladolid? Este plan establece tres fases bien diferenciadas a partir de diferentes valores contaminantes como el dióxido de carbono, el de azufre, partículas en suspensión o benzoapireno. Por un lado está la fase de prevención, la de aviso y, por último, la de alerta.
Ante la gran repercusión que están teniendo en este sentido situaciones como la de Madrid y los cortes al tráfico en el centro de la ciudad, es importante ser un poco pedagógicos en este sentido. Aunque muchas veces no seamos conscientes, el alto grado de contaminación y de gases nos afecta, perjudica a nuestra salud. Toda medida que se pueda tomar es poca en este sentido, crucial también para las personas mayores y los niños.
Dicho lo cual, este Plan de Contaminación solo incluye restricciones en el tráfico en la segunda y tercera fase, que en muy pocas ocasiones se alcanzan en Valladolid. ¿Cómo funciona? En la fase de aviso, además de la información y la promoción del transporte público, se promoverían medidas de restricción del tráfico en el centro, o en su defecto de reducción de la velocidad máxima. En cuanto al caso de alerta las restricciones afectarían tanto al centro urbano como a las principales vías de acceso a la ciudad, también con reducciones de los límites en las zonas en las que se permita circular. Todo ello con el objetivo de reducir estos gases nocivos a corto plazo.
Con este nuevo Plan de Contaminación se pretende caminar hacia un nuevo modelo de ciudad. Una ciudad que da prioridad al peatón, al ciclista y al transporte pública, con el fin de tener un aire y un ambiente más cuidado. ¿Acaso no suena bien?
