En Valladolid Toma la Palabra creemos que el trabajo desde las instituciones públicas debe brindar unos derechos a quienes lo ejercen pero, igualmente, debe ser sinónimo de buen servicio a la ciudadanía. Nos hemos reunido con representantes de las diferentes secciones sindicales en el Ayuntamiento para abordar la mejora en las condiciones laborales de la plantilla municipal y que esta se traduzca en la responsabilidad de asumir la «cultura de lo público», o lo que es lo mismo, la transparencia en la gestión, la participación de la sociedad en los asuntos públicos y, por qué no, la atención y la hospitalidad que merecemos a la hora de resolver cualquier trámite administrativo.
Las recientes reformas legales impiden la adecuada reposición de plazas, que se traduce en un envejecimiento paulatino de las plantilla y en el aumento de la carga de trabajo, provocando importantes desequilibrios y disfunciones en ciertos servicios municipales.
Sin embargo, el Estatuto Básico del Empleado Público (EBEP) recoge un plazo de tres años para ejecutar las ofertas de empleo público y, dado que algunas de estas plazas ya están presupuestadas, apostamos por cubrirlas progresivamente como medida inmediata para completar y rejuvenecer la plantilla municipal. En la misma línea, podrían cubrirse a coste cero las plazas vacantes sin ocupar que figuran dentro de la plantilla presupuestaria.
Los servicios públicos de calidad deben obedecer a criterios de racionalidad, es decir, ha de existir un equilibrio interno de la plantilla que obedezca a las necesidades reales de cada servicio, presentes y futuras. Alcanzar este objetivo pasa por reducir la temporalidad y la provisionalidad que hoy caracterizan a muchos empleos en el sector público. Por ello, creemos que hay que reducir al mínimo los puestos de libre designación y las asesorías personales, y defendemos la aplicación de mecanismos de promoción interna que permitan la carrera profesional dentro de la administración.
Todo lo anterior no tendría sentido sin el adecuado clima laboral que solo puede alcanzarse poniendo en valor la negociación, la consulta y el acuerdo. Evitar que las discrepancias se resuelvan en instancias judiciales pasa por la mejora de las condiciones laborales: a los recortes salariales habría que sumar cuestiones de salud laboral. Pero vamos más lejos y queremos sondear las posibilidades de teletrabajo, conciliación y flexibilidad que brinden las mejores circunstancias de trabajo sin merma en la garantía de servicio ciudadano; garantizar la igualdad salarial para puestos equivalentes (evitando los agravios entre plantilla laboral y funcionaria); y, por supuesto, extremar la vigilancia que garantice la igualdad efectiva entre mujeres y hombres.
Para alcanzar todos estos objetivos Valladolid Toma la Palabra apuesta por la recuperación de servicios públicos actualmente externalizados. Y continuará reuniéndose con representantes de la plantilla municipal para debatir y acordar nuevos criterios y propuestas.