Este lunes fue uno de esos días en los que merece la pena echarse a la calle… pero con el objetivo de disfrutar. Valladolid está demostrando durante estas jornadas que es una ciudad alegre y reivindicativa a favor de lo verde, lo ecológico y la movilidad sostenible por medio de la Semana Europea de la Movilidad, la cual están aprovechando a tope nuestros concejales.
Y sino que se lo digan a Alberto Bustos, que por la tarde estuvo con vecinos y asociaciones en el barrio de la Rondilla celebrando el Parking Day, un concepto que se está abriendo paso desde hace unos años y que demuestra que la calle puede tener otros usos.
Así funciona la Semana de la Movilidad. Con diversión pero al mismo tiempo con conciencia de los vallisoletanos hacia el medio ambiente. No hace tanto tiempo que estos días pasaban de manera discreta en Valladolid, pero esto ha cambiado para quedarse. Queremos un modelo de ciudad ecológica, más limpia, y esto pasa por acotar espacio para los coches y dárselo al peatón y a la bicicleta.
Es precisamente lo que se vino a demostrar en Rondilla, que un grupo de personas con conciencia social y medioambiental pueden, si realmente se quiere, ocupar el espacio de un vehículo y, en este caso, hacer un uso reivindicativo de él.
¿Y qué hizo Alberto Bustos? Pues jugar una partida de parchís la cual, por cierto, ganó. Seguimos.